Hoy estrenamos la sección “consejos de publicación”. Guillermo Salazar, escritor y autor de la obra “ Crónicas Nocturnas” nos ha ofrecido amablemente unos sabios consejos para aquel escritor novel que recién comienza. Nos habla de la diferencia entre autor y escritor, y de diez reglas clave que debe considerar el autor antes de empezar a escribir; como por ejemplo el sentido de la historia, la trama, los personajes, etc...Aparte de su intención didáctica, este breve ensayo tiene pinceladas poéticas y bellas. Leedlo, no tiene desperdicio.
Tengo que dejar en claro una cuestión antes de decir lo que haya que decir: Soy sólo una mota de polvo en la inmensa montaña de lo que es ser un escritor real, un grano de arena en las playas de la literatura. Por lo que muy posiblemente no esté en la mejor posición para discutir del tema, pero es mi opinión lo que les dejo y son las normas en las que yo he tratado de guiarme, a veces con éxito y muchas sin él, en mi intento de ser un hombre de letras.
Ya con eso aclarado vayamos al grano.
En primer lugar pienso que hay que dejar en claro la diferencia que hay, y la hay, entre el autor y el escritor… algunos se preguntaran: ¿Qué le pasa a éste loco?, ¿no qué son la misma cosa?
No, no lo son.
El autor es cualquier persona que escribe algo, cualquier cosa, lo que sea sin importar el dónde, cómo y el por qué. El autor no es otra cosa que el nombre que aparece en la portada de los libros y quien gana, las no tan jugosas debo decir, regalías por las ventas.
Por otra parte el escritor es el artista, el que crea un universo y quien lo comparte, el alfarero de historias, alguien que se sienta frente a una hoja en blanco y crea un mundo para y donde cabemos todos nosotros. En pocas palabras, traídos de la mente brillante de Oscar Wilde, “el escritor es quien usa los pensamientos y el lenguaje como instrumentos para el arte.”
Sólo existen dos cosas que unen a estos dos seres infinitamente diferentes, el autor y el escritor:
Ambos viven en el sublime universo de las letras.
Aunque no siempre es así, ambas facetas suelen residir en una sola persona, pero hay que dejarlas florecer.
Si bien el escritor puede terminar como autor, quiero creer que todo autor puede, con esfuerzo y dedicación, transmutar en un escritor.
¿Cómo pasar de autor a escritor?, ¿Cómo ser un escritor?, ¿Cuándo saber que eres un artista?
Yo pienso que para ser un artista hay que considerarse uno, pero luego se aplican las diez cosas que, Guillermo Salazar, cree indispensables para que un escritor pueda ser considerado como uno, la razón de este ensayo.
Aquí vamos…
La primera cosa que se necesita es un sentido, el saber el impacto que podría tener lo que estás haciendo. Estamos hablando del Gran Arte, la fuente infinita de todos los grandes cambios, logros y revoluciones de la historia. El pozo de la eterna sabiduría. La literatura. Escribir una novela, poema, ensayo o cuento no es poca cosa, es un gran logro, pero tampoco es poca cosa el mensaje que puede dar ese escrito.
En segundo lugar, a pesar de que posiblemente yo no siga a cabalidad este punto, hay que enfocarse en el para quién has de crear tu obra. Si es para los niños, hombres, mujeres, adolescentes, gente mayor. Trama, aventura, acción, amor… lo que quieras, pero una cosa a la vez.
Luego hay que desear expresar un mensaje. Ya sea moral, ético, de humanidad, tus vivencias, una forma de ver el mundo, algo. Porque ese mensaje es el mismo corazón de tu obra, sus cimientos, y si los cimientos son débiles no importa que hayas construido el edificio más magnifico de todos los tiempos, este ha de desplomarse.
La cuarta cosa que considero indispensable sería el ser consiente de que eres un creador de realidades, un arquitecto de vidas. Sean bellas o terribles, por lo cual se debe siempre tener en cuenta una frase de Charles Dickens: “La única diferencia entre la realidad y la fantasía es que la fantasía tiene que ser creíble.” Y en estos tiempos esa frase cobra mayor importancia que nunca, puesto que el centro de las grandes obras del siglo XXI ya no es el argumento, sino los personajes y su evolución. Podemos crear un mundo de cosas que nunca nadie hubiera soñado antes, pero debe ser un mundo que pudiera ser real, no sólo una quimera.
Lo que me lleva al siguiente punto, que es algo mucho más técnico pero que vale la pena tocarse: Los personajes, en especial el o los protagonistas, deben ser reales, auténticos, parecer y ser creíbles. Entre los muchos ganchos que hay en una obra el más importante son personajes carismáticos y que causen empatía en el lector. Muchos dicen que es bueno para empezar como escritos basarte en personas que conozcas, mas yo prefiero el método de Tolstoi, quien siempre en sus obras introducía – en primero o segundo plano – un personaje autobiográfico… aunque a mí no quede tan bien esos detalles.
Luego nos toca hablar sobre la trama. Sólo puedo decirles que hay dos formas de hacer un argumento que yo considero bueno – dejar que los personajes y eventos parezcan y creen sus vivencias según vayan viniendo por si solos o se puede crear un rígido esquema de acciones y eventos antes de escribir una sola letra – de los cuales yo me decanto por la improvisación, soy muy poco paciente a la hora de estructurar guiones. Pero más importante aún es saber que lo importante no es contar la historia (ya todas las historias fueron contadas), lo importante es como contar la historia, eso es lo que hacen los buenos escritores. Convertir lo ordinario en fantástico.
La séptima cosa que considero importante es encontrar nuestro propio estilo. De nada sirve transcribir los más hermosos versos o relatos con el sello de los grandes maestros, pues tiene que ser nuestro propio corazón el que nos hable y le cante al mundo. Si te dignas a llamarte escritor, quien podría ser el faro del siglo XXI, solamente debes buscar y encontrar tu propia forma de escribir, tu voz y al hacer esto… créeme, sabrás que has hecho algo trascendental.
Recuerda que el cielo es el límite. Puedes escribir sobre lo que quieras, donde sea y cuando sea. Usando otra vez la genial genialidad de Oscar Wilde: “Un libro no es, en modo alguno, moral o inmoral. Los libros están bien o mal escritos. Eso es todo.”
Una regla fundamental es leer. No se puede escribir sin leer o leer sin escribir… pero no basta leer Harry Potter o Narnia. Debes viajar en la balsa que nos lleva a los Infiernos, conocer las aventuras de los enajenados, conocer los dilemas de los malditos y regodearnos en las dulces mieles y pensares de los amantes. Esto como noveno punto…
Y por último, pero no menos importante esta el darse cuenta que escribir no es un acto de talento, es un acto de constancia. Todas las artes requieren esfuerzo – ¿acaso pensaron que seria tan fácil vender diez millones de copias en la semana de publicación? – y sacrificio, pero lo que nos deja el ver cuando esta terminada una obra vale una y mil veces más que lo que se pueden imaginar.
El mundo seria otro si la Mona Lisa fuera nada más que bocetos, si el David de Miguel Ángel no fuera otra cosa que un trozo de piedra en la cantera todavía, si el Quijote nunca nos hubiera mostrado un nuevo mundo de aventuras y de historias (con el Quijote se inicia el género de la novela moderna). Lo mismo podría ocurrir si tus relatos, poemas, cantos o cuentos no son inmortalizados.
Recuerda que esta es una pasión, nuestra pasión. Olviden todo los que les he dicho hasta ahora, olvídenlo todo. Dificultades, contratiempos, miedos, déjenlo todo atrás. Nada de eso importa…
Al final de todas las cosas. La vida no se basa en si fuiste exitoso o no, en si eres rico o pobre. La vida se puede llamar vida cuando de verdad haces lo que es tu pasión y vocación, estas con quien más amas y cuando tus convicciones se imponen… todo lo demás es de relleno.
Facilitado por: Adala Cyrene
Qué recontrabuena está esta entrada!
ResponderEliminarLa voy a recomendar a una amiga que está en medio del tormentón que significa escribir una novela.
A mi me hizo muy bien cada consejo de Guillermo Salazar, algunos los descubrí por propia experiencia, otras los supuse por sentido común y por ensayo y error, pero constatar de que la cosa es así, es una sensación fantástica.
Me siento menos sola, menos enajenada, mas convencida de que el camino es por ahí.
Un abrazo y esto se pone bueno!
Pato (Perras Negras, sábados 19 Hs)
www.radiohartares.com/escuchar
O es que estas menos enajenada o que ambos estamos igual de locos XD
ResponderEliminarGracias por ese artículo. Esta noche sé que soy escritora más que autora.
ResponderEliminarNo podría vivir sin escribir pero puedo vivir perfectamente sin publicar lo que escribo.
Gracias por ese decálogo que siempre estará junto con mi visión de una obra. Sólo quisiera romper una lanza por estos compañeros, que quizás como yo, osamos editar un ensayo con tintes autobiográficos. Es una encrucijada cuando la editorial va enviándo trozos o el libro entero, para recopilar su información. Al final todo se reduce a la sinceridad y honestidad en la expresión de esas emociones y en mi caso en la valentía de compartirla, sabiendo que se van a publicar y además quiénes la van a leer. Pero como por una parte bien dices, es la forma, la que hace de cualquier trabajo con esos tintes autobiográficos sea apreciada en lo que vale y en el esfuerzo para dejarla plasmada definitivamente en PDF para entrar en máquina. Cada ensayo o novela, va dirijo por nuestro corazón. Creamos a partir de nuestros sueños, y cada frase o capítulo marcado por el momento emocional.Pienso que aunque nos parezca subrealista forma parte de esa obra, y porqué no, al final sea una obra de arte. El tinte autobiográfico que de nuevo incluso en mi nueva novela, la cual me permito osar escribir, nace de la devolución sobre lo vivido y compartido de alguna forma conmigo y que garadezco devolviendo un poco de mí en mi humilde trabajo. Si sirve de algo, a mí no me está yendo mal, y si puedo compartiré un poco de ese tinte autobiográfico sin verguenza para que al mismo tiempo mi alma se funda es este nuevo sitio, donde se me ha aceptado sin problemas. Con lo cual añado un agradecimiento más a Adala y quienes la yudan desinteresadamente leyendo, actualizando y entrevistando a vosotros, mis compañeros de vocación de los que tanto quiero y necesito aprender. Y naturalmente sin importarme si ha publicado mucho, poco o nada. Sólo escribo con el corazón, ojala poco a poco podáis enseñarme a saber tratar esa técnica que tenéis y de la que yo carezco. Gracias Guillermo por tu gran aportación
ResponderEliminar¡Qué risa! (el comentario de Guillermo, creo que estamos locos los dos, ajjajaja, pero me gusta esta locura)
ResponderEliminar¡Qué bien que vienen esos aportes de cada comentario!
Un abrazo.